La JMJ acabó en agosto, pero sus frutos, su mensaje, su fuerza, acaba de comenzar. Así se manifestaron dos de los invitados a la nueva Jornada de Cooperadores, celebrada en el IESE el pasado día 19. Una convivencia que cada vez coge más fuerza, y se convierte en cita obligada para cooperadores y amigos cada mes de noviembre.
Buena parte de la convivencia estuvo centrada en recordar el mensaje del Papa durante la pasada JMJ, en Madrid. Para ello, el profesor Rafael Llano, de la Facultad de CC de la Información de la UCM, preparó una ponencia, donde destacó dos aspectos:
1. Además del bien personal que llevó la Jornada a muchas personas, esos días sirvieron para dar un impulso grande a la Iglesia Universal y, por tanto, a la iglesia española. Los jóvenes pusieron de manifiesto al mundo que hay un ilusionante futuro.
2. El segundo mensaje que destacó el ponente consiste en la influencia de la JMJ en todos los jóvenes y peregrinos, en los que sin duda este encuentro mundial ha supuesto una conclusión personal e íntima sobre su vida y su vocación.
Al final de la conferencia hubo un breve, pero interesante debate entre los asistentes al acto.
Tras la comida, estuvo en la tertulia D. Javier Cremades, que fue el Coordinador de los actos centrales de la JMJ. Contó numerosas anécdotas que con el buen humor que le caracteriza, que pusieron un ameno broche final a la Convivencia.
Asistieron casi un centenar de personas, la mayor parte de Madrid y ciudades cercanas como Segovia y Ciudad Real. También, algunas llegadas de lugares más alejados como Sevilla, Valencia, Murcia y Valladolid.